El crecimiento económico sí es una asignatura pendiente, reconoció el Presidente Andrés Manuel López Obrador durante la clausura del Foro Estratégico Banorte, realizada en un hotel de la Ciudad de México.
“No basta con el combate a la corrupción, se requiere que haya
crecimiento económico y esa es la asignatura pendiente, eso tenemos que
procurar”.
El mandatario afirmó que se creció poco y se logró no caer en
recesión; sin embargo, destacó que hubo un crecimiento en la inversión
extranjera directa.
“Se han recibido 18 mil millones de dólares, un crecimiento con
relación a lo que se obtuvo en inversión directa extranjera del primer
semestre del año pasado de 1.5 por ciento, y esta creciendo el comercio
exterior.
“Esta acción se va a consolidar porque hay indicios para que se
apruebe el Tratado de Libre Comercio en Estados Unidos y Canadá, esto va
a significar más inversión para el país, más creación de empleos, más
crecimiento económico”, expresó.
Durante su intervención, el mandatario se dijo gustoso de participar
en este foro, pues Banorte es una institución que lo ha apoyado en las
buenas y en las malas.
Recordó que desde tiempos de Roberto González Barrera se tenía comunicación cuando era jefe de Gobierno del entonces Distrito Federal.
“También después ya en la oposición que ahí es donde se pueden
aquilatar mejor las cosas, ahí es donde se ve si hay amistad sincera o
no la hay, porque en la política suele pasar que se tiene amigos de
mentira y enemigos de verdad. Don Roberto era un amigo de verdad”.
Lo anterior porque, recordó, tras el fraude de 2006 fue víctima de
guerra sucia, y optó por abrir una cuenta bancaria, para seguir
financiando su movimiento, en un banco que no quiso nombrar, pero de un
momento a otro se la cancelaron.
“Sin ninguna explicación se cancela la cuenta, no querían ninguna
relación con nosotros, y nos abrió la cuenta en Banorte, ¿verdad que sí
merece un reconocimiento?” , expresó.
Durante el encuentro, el presidente del Consejo Administrativo de Banorte, Carlos Hank González,
le entregó un reconocimiento con el logo del banco, el cual estuvo a
punto de caerse por el peso que aportaban las shakiras huicholes que le
adornaban.